¿Qué es el dividendo digital?
Desde el comienzo de las emisiones de televisión a principios del segundo cuarto del pasado siglo XX, la televisión analógica ha utilizado parte de la banda de frecuencias de VHF (47 a 230 MHz) y parte de la banda de UHF (470 a 862 MHz) para su emisión.
Con la llegada de las tecnologías digitales, así como de nuevos sistemas de compresión de información, se ha conseguido que lo que antes se transmitía en seis canales radioeléctricos, mediante la utilización de la tecnología digital puede ser emitido ahora en un único canal.
Este espectro que no es necesario utilizar, en la práctica puede aplicarse bien para la emisión de nuevos programas de televisión en ámbitos diversos (nacional o regional) o bien para su uso por parte de otros servicios (DVB-H, telefonía móvil, etc.). Este excedente de espectro radioeléctrico es lo que se denomina Dividendo Digital.
Durante los últimos años ha aumentado la percepción del valor de las tecnologías y servicios de comunicaciones electrónicas inalámbricas, tanto para la innovación tecnológica, como para conseguir ganancias de productividad, crecimiento, así como reducciones de coste en la economía global.
Todos estos factores han llevado a alcanzar un consenso a nivel mundial, para disponer de manera urgente de espectro radioeléctrico adicional para redes y servicios de comunicaciones electrónicas. Se ha acordado atribuir al servicio móvil la banda de 790-862 MHz dentro de la zona europea, dado que tiene un gran potencial para el suministro de un amplio rango de servicios en movilidad. Esto es debido a que las señales en dicha banda tienen mejores propiedades de propagación y penetración en el interior de edificios que las bandas más altas, utilizadas en la actualidad para las comunicaciones móviles inalámbricas. Por otro lado, la universalidad de la banda ancha sólo puede conseguirse de manera eficiente usando tecnologías inalámbricas, por lo que dicha banda representa una oportunidad única para proporcionar servicios de banda ancha en zonas rurales, disminuyendo con ello la brecha digital.
Asimismo, la banda de 790-862 MHz es imprescindible para estimular el despliegue de los servicios de nueva generación de móviles, la denominada 4G.
Adicionalmente, un aumento de los recursos de espectro disponibles creará nuevas oportunidades para la innovación en sectores orientados a los servicios como la salud, educación, gobierno y accesibilidad electrónicos.
Los organismos internaciones especializados en telecomunicaciones y las instituciones comunitarias están adoptando decisiones para que las subbandas de frecuencias de 790 a 862 MHz (canales radioeléctricos 61 a 69) en lo que se ha venido a denominar “dividendo digital”, puedan ser utilizadas para otros usos, como los nuevos servicios de telefonía móvil de última generación (4G).